La idea desde el primer momento fue crear un edificio aislado, pequeño y en contraste con la naturaleza, para realizar una animación 3D que no solo fuera un simple recorrido por un edificio, sino que mostrara una pequeña parte del proceso de trabajo que supone diseñar algo así.

A partir de eso, surgió la idea de utilizar la maqueta como un recurso recurrente: el proyecto como maqueta, el proyecto terminado con la misma maqueta dentro, maquetas dentro del edificio y para rematar, la idea de realizar una animación 3D con las modelos físicos como protagonistas.

Al ser un proyecto propio, se realizó durante los escasos ratos libres de los que dispuse, lo que alargó bastante el desarrollo del proyecto. Sin embargo, una vez finalizado en octubre de 2013 quedó claro que mereció la pena.

Aquí tenéis el resultado, espero que os guste:

NOTA: Aunque sigo orgulloso del proyecto y de la historia que cuenta, se realizó en 2013. Actualmente el nivel gráfico y de desarrollo que realizo de forma estándar es mucho mayor y mejor. Algún día, si tengo tiempo, volveré a realizarlo.

El proceso de realización incluye la idea así como la realización del 3D, animación y tour virtual, lo que permite dar una imagen global de gran parte de las opciones visuales que se pueden realizar con técnicas 3D. Más allá, también tuvimos en mente algo que pudiera interesar a diversos sectores: Es por eso que se muestra tanto el interior como el exterior, tanto en representación realista como conceptual.

Después de la publicación de la animación, escribí un artículo en el blog con varias imágenes que quedaron fuera del corto y con muchas curiosidades como el número de render necesarios, imágenes 3D de algunas escenas eliminadas, tiempos de desarrollo, etc.

Como la idea es comunicar mediante la imagen y no las palabras, ya no cuento más y os dejo con varios render sueltos y un par de panorámicas 3D modificadas para dar un aspecto más artístico.